Los estudiantes de este siglo han cambiado radicalmente, ya no son iguales a los de veinte cuantos años atrás y el que se niegue a aceptar esta realidad, simplemente está creando una bomba de tiempo que no tardará en explotar.Los niños de hoy tienen como lengua materna el lenguaje digital de las computadoras, los videojuegos y el internet, ellos no son capaces de desarrollar temas usando papel y lápiz, pero si son capaces de crear y desarrollar temas a través de imágenes, música y animaciones. Por qué será que a nuestros políticos y encargados de desarrollar los programas educativos les cuesta tanto entender ésto. El Sistema Educativo costarricense está obsoleto desde finales de la década de los ochenta y los parches que se le han hecho no son suficientes para atender las demandas y necesidades de los estudiantes actuales.
Actualmente no sabemos ni siquiera que tipo de ciudadanos queremos para el futuro. La falta de conocimiento de la historia, respeto a los símbolos nacionales y desconocimiento del comportamiento cívico básico es una constante en ellos. Muchos profesores insisten todavía en utilizar "mañas" viejas de la educación como los dictados y clases magistrales a la hora de impartir sus lecciones, convirtiendo a las aulas en un salón de tortura típico de la época de la inquisición. Algunos parecieran hacer mérito al lema de que la letra con sangre entra.
Pero ya es momento de finalmente ponerle un fin a éste desastre que tenemos en frente. Debemos educar a los estudiantes con metodologías, filosofías y tecnologías modernas. Debemos hablarles en su propio lenguaje, para que entonces las lecciones se vuelvan interesantes y el aprendizaje finalmente se dé. No debemos seguir alentado el sistema de memorización temporal moderno que al final no deja nada. Debemos desafiar a los estudiantes haciéndoles preguntas en clase que los hagan pensar y los hagan querer saber más de los temas que se estudian. De que nos sirve darles resumenes y hacerlos memorizar palabras exactas de las páginas de los libros si al final ellos no van a comprender lo que están repitiendo.
En fin éstas son algunas de las interrogantes e ideas que estaré compartiendo en los próximos blogs en busca de respuestas compartidas, que nos permitan trazar el nuevo horizonte de la educación costarricense.
Actualmente no sabemos ni siquiera que tipo de ciudadanos queremos para el futuro. La falta de conocimiento de la historia, respeto a los símbolos nacionales y desconocimiento del comportamiento cívico básico es una constante en ellos. Muchos profesores insisten todavía en utilizar "mañas" viejas de la educación como los dictados y clases magistrales a la hora de impartir sus lecciones, convirtiendo a las aulas en un salón de tortura típico de la época de la inquisición. Algunos parecieran hacer mérito al lema de que la letra con sangre entra.
Pero ya es momento de finalmente ponerle un fin a éste desastre que tenemos en frente. Debemos educar a los estudiantes con metodologías, filosofías y tecnologías modernas. Debemos hablarles en su propio lenguaje, para que entonces las lecciones se vuelvan interesantes y el aprendizaje finalmente se dé. No debemos seguir alentado el sistema de memorización temporal moderno que al final no deja nada. Debemos desafiar a los estudiantes haciéndoles preguntas en clase que los hagan pensar y los hagan querer saber más de los temas que se estudian. De que nos sirve darles resumenes y hacerlos memorizar palabras exactas de las páginas de los libros si al final ellos no van a comprender lo que están repitiendo.
En fin éstas son algunas de las interrogantes e ideas que estaré compartiendo en los próximos blogs en busca de respuestas compartidas, que nos permitan trazar el nuevo horizonte de la educación costarricense.
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